Anchorage, Alaska.– El presidente de Rusia, Vladímir Putin, arribó este viernes a la Base Conjunta Elmendorf-Richardson, marcando el primer encuentro presencial con el mandatario estadounidense Donald Trump desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania en 2022. La reunión busca evaluar las posibilidades de un alto el fuego y abrir un eventual proceso de paz.
Putin llegó a las 10:55 de la mañana, hora local, bajo un fuerte dispositivo de seguridad. Fue recibido por Trump con un apretón de manos sobre una alfombra roja, mientras aeronaves militares sobrevolaban la zona como parte del protocolo. Aunque inicialmente se esperaba un diálogo privado, el encuentro se amplió al formato “tres contra tres”: Trump estuvo acompañado por el secretario de Estado, Marco Rubio, y el enviado especial Steve Witkoff; Putin, por su parte, incluyó al canciller Serguéi Lavrov y al asesor Yury Ushakov.
La visita ha generado reacciones encontradas. En las calles de Anchorage, cientos de manifestantes ondearon banderas ucranianas y pancartas en rechazo a la presencia de Putin, mientras pequeños grupos mostraron apoyo. Analistas consideran que el viaje representa un intento del Kremlin por romper su aislamiento internacional. Trump aseguró que cualquier decisión sobre concesiones deberá ser tomada por Kiev y advirtió que, si no hay avances, impondrá sanciones económicas “muy severas” contra Rusia.