La tragedia ocurrida el pasado 10 de septiembre en el Puente de la Concordia, en Iztapalapa, ha cobrado una nueva víctima: ya son 10 las personas fallecidas a causa de la explosión de una pipa cargada con gas LP, de acuerdo con el último informe de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México. Además, se reportan 54 personas hospitalizadas, de las cuales varias permanecen en estado crítico, mientras que 22 lesionados han sido dados de alta tras recibir atención médica.
La jefa de Gobierno, Clara Brugada, visitó hospitales como el Rubén Leñero y el Magdalena de las Salinas, donde constató personalmente el estado de salud de los heridos y expresó solidaridad a sus familias. Autoridades capitalinas reiteraron que se mantiene un despliegue de apoyo médico y psicológico, así como la actualización constante de la lista de hospitalizados.
Uno de los casos que más ha conmovido a la opinión pública es el de Alicia Matías Teodoro, conocida como la “abuelita heroína” por proteger a su nieta de dos años durante la explosión. Aunque inicialmente se le incluyó en la lista de fallecidos, su familia aclaró que continúa con vida, en estado grave y bajo sedación. Paralelamente, la investigación sobre las causas del siniestro apunta al exceso de velocidad del vehículo como uno de los factores principales que pudieron detonar la tragedia.
