La aplicación de transporte y entregas DiDi presentó este miércoles una falla masiva que afectó a miles de usuarios en distintos países de Latinoamérica, principalmente en México, Argentina y Chile, donde la plataforma dejó de funcionar parcialmente desde las primeras horas del día.
De acuerdo con reportes de usuarios en redes sociales y el sitio especializado Downdetector, los problemas comenzaron alrededor de las 5:00 de la mañana y continúan de forma intermitente. Las principales quejas incluyen errores para iniciar sesión, fallos en la conexión al servidor, cancelación automática de viajes y problemas para procesar pagos con tarjeta de crédito o débito.
En México, los reportes se concentran en ciudades como Ciudad de México, Guadalajara, Monterrey y Puebla, mientras que en Argentina los usuarios de Buenos Aires y Córdoba han informado afectaciones similares. En Chile, el impacto ha sido notorio en Santiago y Valparaíso, donde repartidores de DiDi Food también reportan dificultades para completar pedidos.
Aunque las fallas se registran de manera generalizada en la región, no hay indicios de que se trate de un ataque cibernético o un problema de seguridad. Todo apunta a una interrupción en los servidores de la compañía, que hasta el momento no ha emitido un comunicado oficial para explicar el origen del fallo ni ofrecer un tiempo estimado para el restablecimiento total del servicio.
El silencio de la empresa ha generado molestia entre los usuarios, quienes han recurrido a redes sociales para expresar su frustración y compartir memes bajo el hashtag #DidiCaído. Algunos conductores aseguran que la aplicación se cierra al intentar aceptar un viaje, mientras que los pasajeros no pueden siquiera acceder a la plataforma.
No es la primera vez que la aplicación enfrenta un incidente de este tipo. En julio de 2024, un error en la actualización del sistema dejó sin servicio a miles de usuarios en México y Brasil durante más de seis horas. En aquella ocasión, la empresa atribuyó el problema a un fallo técnico interno.
La caída de DiDi este miércoles vuelve a poner en evidencia la vulnerabilidad tecnológica de las plataformas de movilidad urbana y la importancia de protocolos de comunicación más efectivos ante fallos masivos que afectan tanto a usuarios como a conductores.








