La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo confirmó este martes que México y Estados Unidos sostendrán una reunión técnica para revisar el cumplimiento del Tratado de Aguas de 1944, en medio de la presión del gobierno estadounidense que ha advertido la posibilidad de imponer un arancel del 5 % si no se entrega el volumen pactado.
Durante la conferencia matutina, Sheinbaum aseguró que México está dispuesto a cumplir con sus obligaciones, pero subrayó que existen limitaciones reales derivadas de la disponibilidad de agua en el país y de la capacidad del sistema hidráulico que conduce el recurso hacia el río Bravo. “Siempre buscamos acuerdos que beneficien a ambas naciones; creemos que podremos avanzar en una solución”, afirmó.
La mandataria explicó que el reporte hídrico actual del norte del país ha sido afectado por periodos de sequía prolongados, lo que obliga a priorizar el consumo humano y la producción agrícola. Sin embargo, sostuvo que estas condiciones no implican un rechazo al tratado, sino la necesidad de ajustar los volúmenes según la capacidad física y climática del ciclo.
Sheinbaum se mostró optimista respecto al diálogo con Washington y descartó que la amenaza de aranceles escale. Recordó que en episodios previos —incluyendo tensiones comerciales recientes— ambos gobiernos han logrado acuerdos sin afectar la relación bilateral. “Hay voluntad y canales abiertos. Nuestro objetivo es mantener la cooperación y cumplir dentro de lo posible”, señaló.
El encuentro técnico de este martes será determinante para definir una hoja de ruta sobre los volúmenes pendientes, así como para evitar una nueva fricción comercial que podría impactar sectores estratégicos de México.








