Pío López Obrador y su error garrafal

Pío López Obrador dice que tiene nueve años de no ver a su hermano presidente, cuando hay pruebas de que estuvo con él en su toma de posesión en 2018.
Pío López Obrador y su error garrafal

Pío López Obrador, hermano del presidente Andrés Manuel López Obrador, cometió un error garrafal. Salió a la luz pública. Demandó al periodista Carlos Loret de Mola y al medio digital Latinus por un total de 400 millones de pesos, alegando daño moral debido a la publicación de videos donde se le muestra recibiendo sobres con dinero en efectivo. La controversia surge de la difusión de estas grabaciones por Latinus, donde Pío López se ve recibiendo cantidades de dinero de David León, operador político en ese entonces del gobernador de Chiapas, Manuel Velasco. Loret de Mola ha expresado preocupación por esta demanda, interpretándola como un intento de intimidación y un ataque a la libertad de expresión, cuestionando las motivaciones detrás de la suma exigida y sugiriendo que podría tratarse de una estrategia del gobierno para silenciar a los medios críticos????. Este caso ha suscitado un amplio debate público sobre la libertad de prensa y la transparencia política en México. El hecho de que Pío López Obrador haya solicitado que el juicio se mantenga en confidencialidad ha añadido otra capa de controversia al asunto. Además, se menciona que el juez del caso podría actuar a favor de Pío López Obrador, según lo expresado por Loret de Mola, quien también denunció que podría enfrentarse a una multa o prisión por hablar del juicio??????. La percepción social va cagada de indignación ante la demanda millonaria, considerándola excesiva y una forma de intimidación hacia los medios y periodistas que publican investigaciones que podrían ser incómodas para figuras públicas o políticos en el poder. La demanda es vista como una burda maniobra para silenciar a la prensa y limitar el escrutinio público. Por si fuera poco, en contra de los principios de un presidente que dice levar 200 pesos en la cartera, su hermano se lució a bordo de Mercedes-Benz con chofer. Esto ha exacerbado las críticas hacia lo que algunos llaman «austeridad hipocritana”, cuestionando la coherencia entre el discurso de austeridad del gobierno y las acciones personales de su círculo rojo. Pío López dice para distanciarse que tiene nueve años de no ver a su hermano presidente, cuando hay pruebas de que estuvo con él en su toma de posesión en 2018. No mentir, no robar, y no traicionar, el cuento que nadie cree.

Dicen que genio y figura, hasta la sepultura, ye so es precisamente lo que retrata a Gerardo Fernández Noroña, quien se olvida absolutamente de su actual encargo en la política, que es ser coordinador de vocería de Claudia Sheinbaum, quien escala montañas en su intento por posicionarse aunque sea mínimamente en el gusto de los electores. Pero nada le ayuda su compañero colaborador. Fernández Noroña, representante del PT en el Consejo General del INE, ha generado controversia por sus comentarios en sesiones públicas y en redes sociales. Es conocido por su estilo confrontativo y su firme defensa de las políticas de la Cuarta Transformación. Recientemente, se destacó por su participación en discusiones sobre la Reforma Electoral propuesta por el presidente López Obrador, reconociendo el éxito de marchas organizadas en defensa del INE, a pesar de oponerse a la reforma. Pero el colmo de este sujeto es que exigió respeto hacia la madre de Joaquín «El Chapo» Guzmán durante una sesión del INE, lo que generó un fuerte intercambio con representantes de otros partidos políticos, especialmente del PAN. Sus comentarios fueron interpretados por algunos como una amenaza velada y un respaldo indebido, provocando reacciones entre los políticos y en las redes sociales. Sus palabras han sido criticadas como ejemplos de hipocresía y de un posible vínculo con prácticas cuestionables, contrastando fuertemente con el discurso oficial de austeridad y legalidad. El uso de referencias a figuras criminales en discusiones políticas ha sido señalado como una táctica intimidatoria y una desviación inapropiada de los temas importantes que deberían ser tratados en el INE. Estas acciones de Fernández Noroña han sido vistas por algunos como un intento de desviar la atención de temas críticos y de minar la credibilidad de la institución electoral, así como la del propio proceso democrático mexicano. Pero en el fondo lo que hacen es descarrilar la carrera presidencial de Claudia Sheinbaum, quien ha tenido que recurrir a las entrevistas de radio en medios nacionales, algo a lo que se había negado rotundamente. El mayor fracaso del proyecto es tener a Fernández Noroña de su lado, cosa que la oposición aplaude de pie.

La gestión de Ana Gabriela Guevara al frente de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte ha estado marcada por acusaciones serias y persistentes que cuestionan profundamente su liderazgo y ética administrativa. La mujer que ha usado su posición política para resolver asuntos personales, tiene encima investigaciones y reportes de diferentes medios y organismos de control han revelado una serie de irregularidades que no pueden pasarse por alto. Salvo por su amigo, el presidente de la República. Hasta ahora, Andrés Manuel López Obrador la ha defendido diciendo que es honesta, de la misma manera en la que en un principio defendía a Sanjuana Martínez, a quien le dio la agencia de noticias del estado mexicano, por ser una periodista íntegra, y le falló. En ambos casos los deseos presidenciales de colaboradores honestos, se queda en eso, en un anhelo. Con Ana Guevara, quien se ha vuelto campeona de la prepotencia, primero, la Auditoría Superior de la Federación ha presentado denuncias ante la Fiscalía General de la República relacionadas con un probable quebranto financiero durante su administración. La reinstalación de funcionarios anteriormente destituidos por corrupción es un claro reflejo de una administración negligente que no solo pone en duda la integridad de la Conade sino que también mancha la credibilidad de la institución encargada de promover el deporte y la cultura física en México??. Ana Guevara, además, no solo ha abandonado a los atletas mexicanos, sino que inclusive los ha enfrentado. Las decisiones cuestionables en la selección de atletas para eventos internacionales, como los Juegos Olímpicos de Tokio, han generado controversia y decepción entre la comunidad deportiva, especialmente cuando atletas destacados como Paola Espinosa fueron excluidos bajo circunstancias cuestionables. Estas decisiones parecen reflejar un proceso de selección opaco y posiblemente sesgado, que mina la meritocracia y la justicia deportiva??. Más alarmante aún son los informes sobre la firma de contratos por cantidades exorbitantes con empresas que presentan irregularidades. El colmo son las facturas falsas presentadas por entrenadores que no existen. Difícilmente alguien le ganará a Ana Guevara la carrera de la corrupción. Va sola.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

noticias relacionadas