La UNESCO declaró oficialmente a la cocina italiana como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, un reconocimiento histórico que eleva a la gastronomía de Italia como un símbolo global de identidad, tradición y cohesión social. La decisión fue adoptada este 10 de diciembre durante la reunión del Comité Intergubernamental en Nueva Delhi, convirtiendo a Italia en el primer país del mundo cuya cocina nacional recibe esta distinción en su conjunto.
De acuerdo con la resolución, la cocina italiana fue reconocida no solo por sus recetas emblemáticas, sino por el sistema cultural que la rodea: sus rituales familiares, la transmisión generacional de técnicas, la diversidad regional y el papel central que ocupa en la vida cotidiana. La UNESCO destacó que la gastronomía italiana constituye un patrimonio vivo que expresa valores comunitarios, creatividad y continuidad histórica.
La primera ministra Giorgia Meloni celebró el anuncio como “una victoria nacional de enorme trascendencia”, afirmando que el reconocimiento fortalecerá la protección de los productos y tradiciones gastronómicas del país frente a la imitación, la estandarización y la pérdida de autenticidad. “Es un homenaje a nuestra identidad y al trabajo de generaciones enteras”, señaló.
El reconocimiento abarca la totalidad del universo culinario italiano: desde pastas y panificados tradicionales hasta quesos, vinos, técnicas de preparación, celebraciones, mercados regionales y prácticas de cocina casera que forman parte del estilo de vida del país. Según autoridades italianas, la inscripción será utilizada para impulsar políticas de protección de productos locales, programas educativos y estrategias culturales que refuercen la herencia gastronómica ante los desafíos de la globalización.
Con esta decisión, la cocina italiana se incorpora a la lista de patrimonios inmateriales que la UNESCO considera esenciales para la diversidad cultural del planeta, subrayando su influencia global y su papel en la construcción de comunidades dentro y fuera de Italia.
