La actriz Diane Keaton, una de las figuras más emblemáticas del cine estadounidense, falleció este sábado a los 79 años en California, informaron medios internacionales como People y Entertainment Weekly. Hasta el momento no se han revelado las causas del deceso, y su familia ha pedido privacidad durante este momento de duelo.
Keaton, reconocida por su estilo inconfundible y su carisma, ganó el Premio Óscar a Mejor Actriz por su papel en Annie Hall (1977), dirigida por Woody Allen, cinta que la consolidó como un ícono de la comedia romántica. A lo largo de su carrera, protagonizó películas fundamentales como El Padrino (1972), Rojos (1981), Manhattan (1979), Días de radio (1987), Padre de la novia (1991) y El club de las divorciadas (1996).
Además de su talento actoral, Keaton destacó por su estilo personal —trajes masculinos, sombreros y una elegancia única— que rompió esquemas en Hollywood. Su presencia en pantalla siempre estuvo acompañada de humor, inteligencia y sensibilidad, convirtiéndola en una de las intérpretes más queridas por el público y la crítica.
Nacida en Los Ángeles en 1946, Diane Keaton trabajó con algunos de los directores más importantes del cine contemporáneo y fue una de las principales colaboradoras de Woody Allen durante las décadas de los setenta y ochenta. Su legado permanece en una filmografía diversa, que combina el drama y la comedia con una naturalidad que pocas actrices han logrado igualar.
Su partida deja un profundo vacío en el mundo del cine, pero también una huella imborrable en generaciones de artistas y espectadores que encontraron en ella una figura de autenticidad y talento. En paz descanse.








