El Gobierno de la Ciudad de México anunció un paquete de medidas para reforzar la regulación en la circulación de pipas que transportan gas y sustancias peligrosas, luego de la explosión ocurrida en la zona de La Concordia, en Iztapalapa. La jefa de Gobierno, Clara Brugada, explicó que el objetivo es reducir riesgos para la población y garantizar mayor control sobre este tipo de transporte, que atraviesa la capital diariamente.
Entre las disposiciones destacan la limitación de velocidad de estas unidades a 30 km/h, la prohibición de circulación por vías secundarias para aquellas que transporten más de 10 mil litros de hidrocarburos y la restricción total para unidades que carguen más de 40 mil litros de materiales peligrosos. Asimismo, las pipas que trasladen más de 20 mil litros solo podrán circular en horarios nocturnos, de las 22:00 a las 5:00 horas.
Las autoridades capitalinas también anunciaron que se duplicarán las multas relacionadas con el transporte de sustancias tóxicas, además de implementar radares móviles en accesos carreteros para vigilar el cumplimiento de los límites de velocidad. Los conductores deberán contar con licencia tipo E-12 y acreditar un curso especializado para el manejo de materiales peligrosos.
El Reglamento de Tránsito de la CDMX ya establece que estas unidades solo pueden circular por rutas y horarios autorizados, no pueden detenerse en lugares no señalados ni realizar maniobras de carga o descarga fuera de zonas permitidas. Con estas nuevas medidas, el gobierno capitalino busca cerrar los vacíos en la normativa y aumentar la seguridad vial y ciudadana en torno al transporte de sustancias de alto riesgo.








