Marco Rubio, designado por el presidente electo Donald Trump como jefe de la diplomacia estadounidense, abogó este miércoles por trabajar «en cooperación con México» contra los cárteles que, según él, tienen el «control operativo sobre enormes extensiones de las regiones fronterizas».
Durante una audiencia en el Senado para confirmar su nombramiento, Rubio calificó de «herramienta imperfecta» la posibilidad de designar a los cárteles como organizaciones terroristas extranjeras, aunque no la descartó completamente. «Es importante para nosotros no solo perseguir a estos grupos, sino identificarlos y llamarlos por lo que son, y eso son terroristas», declaró.
Rubio también mencionó la opción de utilizar la fuerza contra los cárteles de la droga, señalando que es una decisión que corresponde al presidente Trump y no al Departamento de Estado. «Optaría por cooperar con los mexicanos en este tema, porque impacta tanto a su nación como a la nuestra», añadió.
Durante su comparecencia, Rubio prometió una política exterior sólida centrada en los intereses estadounidenses. Con 53 años, es considerado un halcón chino y un firme partidario de Israel, lo que le augura una confirmación cómoda por parte del Senado.
Los demócratas respaldaron su nominación desde el anuncio de Trump, en contraste con otros candidatos más controvertidos que enfrentaron escepticismo. Rubio abordó temas clave de política exterior, incluyendo una línea más dura contra China y la importancia de poner los intereses nacionales estadounidenses por encima de todo.
Hijo de inmigrantes cubanos y hablante fluido de español, Rubio sería la primera persona de origen hispano en ocupar el cargo de máximo diplomático de Estados Unidos. Sus comentarios durante la audiencia fueron brevemente interrumpidos por manifestantes que mencionaron sanciones estadounidenses a países latinoamericanos como Nicaragua, Venezuela y Cuba.
«Te has ganado uno de los trabajos más difíciles de Estados Unidos. Necesitamos enfrentar estas amenazas», afirmó el senador Jim Risch, presidente republicano del comité, en apoyo a Rubio. La senadora Jeanne Shaheen también destacó sus habilidades y calificación para desempeñarse como Secretario de Estado.
Rubio es conocido por su postura firme contra el gobierno comunista de Cuba y su defensa de Israel, denunciando a la Corte Penal Internacional por la orden de arresto contra el primer ministro israelí Benjamín Netanyahu. «Tienen que defender su seguridad nacional y sus intereses nacionales», declaró en defensa de las acciones de Israel en Gaza.