Un reciente informe del Lancet Countdown Latinoamérica revela un alarmante aumento en las muertes relacionadas con el calor en la región entre los años 2013 y 2022. En promedio, todos los países latinoamericanos han experimentado un incremento del 140% en comparación con el periodo 2000-2009, afectando principalmente a personas mayores de 65 años.
Según el informe, países como Ecuador (+339%), El Salvador (+230%), Honduras (+204%) y Guatemala (+202%) muestran los mayores aumentos relativos, mientras que México (+67%), Argentina (+59%) y Uruguay (+27%) presentan incrementos menores. Esta tendencia ascendente se ha observado de manera consistente en Argentina, Bolivia, México, Paraguay y Uruguay.
La exposición prolongada al calor extremo se asocia con diversas consecuencias negativas para la salud, desde malestar general y dolores de cabeza hasta casos graves como insolaciones y muertes, afectando significativamente a los grupos vulnerables como los niños y las personas mayores.
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Yasna Palmeiro Silva, investigadora del Lancet Countdown Latinoamérica, destacó que el cambio climático también incrementa el riesgo de enfermedades transmitidas por vectores y por agua, como el dengue y la vibriosis. Además, señaló que el uso de combustibles fósiles agrava los problemas de salud, aumentando tanto las muertes como las enfermedades respiratorias debido al material particulado.
El informe también subraya que, en 2022, las pérdidas económicas en América Latina debido a fenómenos meteorológicos extremos ascendieron a 15,6 mil millones de dólares, equivalente al 0,28% del PIB regional. Ante estos desafíos, se enfatiza la necesidad urgente de una transición energética justa y equitativa para reducir la pobreza energética y promover entornos más limpios.
Francisco Estrada Porrúa, coordinador del Programa de Investigación en Cambio Climático (PINCC) de la UNAM, señaló que México enfrenta una alta preocupación por el cambio climático a nivel global, pero cuenta con una capacidad adaptativa limitada y una infraestructura institucional que requiere fortalecimiento. Destacó la falta de investigación en el país sobre cambio climático, con un promedio de solo 60 artículos por año en los últimos 30 años.
En un contexto global, Pedro Arrojo Agudo, relator especial de la ONU sobre Derechos Humanos al Agua Potable y al Saneamiento, alertó sobre la crisis de acceso al agua, afectando a dos mil millones de personas en todo el mundo. Subrayó la importancia de restaurar la salud de los ecosistemas acuáticos para garantizar este derecho humano fundamental.