En Baviera, millones de personas acuden desde el sábado a la capital, Múnich, para celebrar el Oktoberfest. El primer día de la Oktoberfest todos los habitantes de Múnich se dirigen en desfile hacia el recinto de la fiesta, custodiando los carros de las cervecerías que transportan el «oro líquido».
Seis millones de litros
Ésta no queda inaugurada hasta que el alcalde de la ciudad no introduce el grifo en una de las grandes cubas y la cerveza comienza a manar. Durante las dos semanas siguientes se servirán hasta seis millones de litros de cerveza en grandes jarras de un litro.
Con el tradicional grito de «O’zapft is» («¡Está abierto!»), el alcalde Dieter Reiter abrió el grifo del primer barril, a mediodía de este sábado, inaugurando oficialmente los 18 días de fiesta, y se le unió para brindar el primer ministro del land de Baviera, Markus Söder.
En cuanto se abrieron las puertas, hombres y mujeres, ataviados con los trajes tradicionales, lederhosen pare ellos y dirndl para ellas, acudieron al recinto del Oktoberfest, llenando las docenas de carpas a la espera de su primera jarra de cerveza de un litro (dos pintas).
El Oktoberfest, literalmente el ‘festival de octubre’ aunque se inicia en septiembre, suele atraer a unos seis millones de visitantes cada año.
No se celebró en 2020 ni en 2021 porque las autoridades se enfrentaban al COVID-19, pero regresó en 2022.
Este año, una jarra de un litro cuesta entre 12,60 euros y 14,90 euros (13,45-15,90 dólares estadounidenses), lo que supone un aumento de alrededor del 6% respecto al año pasado.
El Oktoberfest de este año, la 188ª edición del evento, se celebra hasta el 3 de octubre.
Historia
La primera Oktoberfest se celebró el año 1810, con motivo de la boda del príncipe heredero bávaro Ludwig con la princesa Therese von Sachsen-Hildburghausen.