Japón, 8 enero.- El balance de víctimas mortales a causa del terremoto de magnitud 7.6 registrado el primero de enero en el oeste de Japón ascendió a 126 y 211 personas continúan desaparecidas, según confirmaron ayer autoridades locales recogidas por la agencia Kyodo.
Estas cifras son consideradas como las más letales desde 2016, cuando se registró un sismo en Kumamoto que dejó de saldó con 276 muertos.
Ishikawa la zona más afectada
Según la prefectura de Ishikawa, la más afectada por el sismo, han sido confirmados 69 muertos en la ciudad de Wajima, 38 en la ciudad de Suzu, nueve personas en la ciudad de Anamizu, cinco personas en la ciudad de Nanao, y dos personas en Noto, dos en Shika y una en Hakui.
Una de las buenas noticias ayer fue el rescate de una nonagenaria de entre los escombros de una casa destruida en la localidad de Suzu, en lo que se trata del primer salvamento de las últimas 24 horas.
La mujer, hallada inconsciente, ha sido posteriormente estabilizada.
Mientras los desplazados abarrotan los centros de evacuación de Wajima en busca de alimentos, agua y otros productos básicos, algunos residentes optan por dormir en sus vehículos.
“No me gusta vivir con mucha gente a mi alrededor”, dijo una damnificada.