Un ataque masivo con misiles y drones contra la capital ucraniana dejó al menos 19 muertos y más de 40 heridos la madrugada de este jueves, según autoridades locales. El bombardeo, uno de los más intensos en los últimos meses, afectó de manera directa a la delegación de la Unión Europea (UE) en Kiev, cuyo edificio quedó gravemente dañado. Hasta el momento, no se reportan víctimas entre el personal diplomático.
De acuerdo con la Fuerza Aérea ucraniana, Rusia lanzó decenas de misiles, incluidos proyectiles balísticos e hipersónicos Kinzhal, además de un elevado número de drones kamikaze. Si bien la defensa aérea logró interceptar una parte significativa, varios impactaron en zonas residenciales y edificios institucionales.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, condenó el ataque y calificó el hecho como “un acto de agresión inaceptable contra civiles e instituciones internacionales”. En respuesta, la UE anunció que convocará al enviado ruso en Bruselas y adelantó que prepara nuevas sanciones contra Moscú.
El Reino Unido también confirmó que su sede del British Council en Kiev sufrió daños estructurales, aunque sin víctimas entre su personal. Londres y Bruselas emitieron una protesta diplomática conjunta y exigieron a Rusia cesar los bombardeos contra infraestructura civil.
Mientras tanto, los equipos de rescate ucranianos continúan las labores de búsqueda entre los escombros, donde se teme que aún haya personas atrapadas. El alcalde de Kiev, Vitali Klichkó, informó que varios edificios de vivienda quedaron inhabitables y que se ha dispuesto refugio temporal para las familias afectadas.
El ataque ocurre en un contexto de recrudecimiento de la ofensiva rusa en distintas regiones de Ucrania, a pocos días de cumplirse un nuevo aniversario del inicio de la invasión.