El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sostuvo el 4 de septiembre en la Casa Blanca una cena privada con los principales magnates de la tecnología, en la que obtuvo compromisos de inversión por cientos de miles de millones de dólares. El encuentro, realizado en el Salón de Recepciones tras un cambio de sede por mal clima, reunió a figuras como Mark Zuckerberg (Meta), Tim Cook (Apple), Sundar Pichai y Sergey Brin (Google), Bill Gates y Satya Nadella (Microsoft), Sam Altman (OpenAI), Safra Catz (Oracle) y Lisa Su (AMD).
Durante la velada, Trump pidió directamente a los ejecutivos anunciar montos concretos de inversión en el país, lo que derivó en promesas de gran escala. Apple y Meta comprometieron 600 mil millones de dólares cada una, Google anunció 250 mil millones, mientras que Microsoft proyectó destinar entre 75 y 80 mil millones anuales a proyectos de infraestructura y desarrollo tecnológico en Estados Unidos.
El evento, al que no asistió Elon Musk, quien envió un representante, fue interpretado como un respaldo del sector tecnológico a la agenda pro-empresa y pro-innovación de Trump. Los líderes coincidieron en destacar el papel del gobierno en el impulso a la inteligencia artificial y la competitividad global, lo que refuerza la estrategia política del mandatario de consolidar alianzas con la industria tecnológica en medio de un contexto de tensiones comerciales y regulatorias.
