En un hecho inesperado, los presidentes Donald Trump y Volodímir Zelensky sostuvieron este sábado una reunión privada en la Basílica de San Pedro, en el Vaticano, minutos antes del funeral del papa Francisco. El encuentro, de aproximadamente 15 minutos, representó el primer diálogo cara a cara entre ambos líderes desde su tensa reunión en Washington, en febrero pasado.
Las imágenes del encuentro, difundidas por la presidencia de Ucrania y medios internacionales, muestran a Trump y Zelensky sentados frente a frente en sillas sencillas, en medio del suelo de mármol de la basílica, sin asesores presentes. Posteriormente, ambos fueron vistos conversando también con el presidente francés Emmanuel Macron y el primer ministro británico Keir Starmer.
La Casa Blanca calificó la reunión como “muy productiva”, mientras que Zelensky la describió como “simbólica” y con potencial de convertirse en “histórica”, al reiterar su llamado a un alto el fuego total e incondicional en Ucrania. El mandatario estadounidense, quien en el pasado adoptó posturas conciliadoras hacia Moscú, criticó públicamente los recientes ataques rusos contra civiles y advirtió sobre posibles nuevas sanciones al sistema bancario ruso si no se logran avances hacia la paz.
La fotografía del encuentro ha sido interpretada por analistas como un gesto de reconciliación y un posible punto de inflexión en las negociaciones diplomáticas, destacando la carga simbólica del lugar y el contexto en que ocurrió.