Washington, D.C., 23 de mayo de 2025 — La Universidad de Harvard presentó una demanda contra la administración del expresidente Donald Trump, luego de que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) revocara la autorización de la institución para admitir estudiantes internacionales, alegando falta de cooperación con investigaciones sobre protestas propalestinas en el campus.
Alan Garber, presidente interino de Harvard, calificó la medida como “ilegal e injustificada” y anunció que la universidad solicitará una orden de restricción temporal para impedir la entrada en vigor de la decisión mientras se resuelve el litigio. La medida afecta directamente a más de 6,800 estudiantes extranjeros que actualmente forman parte de la comunidad académica de Harvard.
De acuerdo con el DHS, la decisión se tomó luego de que la universidad se negara a entregar información sobre estudiantes presuntamente involucrados en manifestaciones, lo que la agencia interpretó como una muestra de antisemitismo y una supuesta cooperación con intereses extranjeros. En respuesta, Harvard argumenta que la revocación de su certificación ante el Programa de Estudiantes y Visitantes de Intercambio (SEVIS) viola la Primera Enmienda y constituye una represalia política.
La acción legal se da en un contexto más amplio de tensión entre universidades y la administración Trump, que recientemente ha congelado más de 2,700 millones de dólares en fondos federales destinados a instituciones académicas. Diversos sectores de la comunidad académica, así como líderes internacionales, han expresado su preocupación por el impacto que estas decisiones puedan tener sobre la libertad académica y la imagen de Estados Unidos como destino educativo.
