La presidenta Claudia Sheinbaum respondió este jueves a la postura de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) sobre la posible revisión de sentencias firmes y afirmó que no comparte el criterio planteado por algunos ministros. “Lo que ya fue juzgado, fue juzgado”, dijo desde Palacio Nacional, al subrayar que la seguridad jurídica debe mantenerse como un principio fundamental del sistema judicial.
Aunque reconoció la autonomía de la Corte, la mandataria exhortó a sus integrantes a concentrarse en los asuntos que, aseguró, se mantienen rezagados. “La Corte tiene muchísimos temas pendientes que requieren resolución. Es importante que se ocupen de ellos”, señaló, al reiterar que la revisión de casos concluidos podría generar incertidumbre en procesos legales que ya cuentan con sentencia firme.
El debate surgió luego de que ministros de la SCJN consideraran la posibilidad de reabrir juicios previamente sentenciados en casos de corrupción, fraude procesal u otras irregularidades. La presidenta insistió en que dichos mecanismos ya están contemplados en la ley bajo figuras excepcionales como el reconocimiento de inocencia o amparo directo, por lo que modificar el principio de cosa juzgada sería innecesario y riesgoso.
Sheinbaum enfatizó que su postura no viola la separación de poderes, sino que representa “una opinión legítima frente a un tema de interés público”. Añadió que su gobierno continuará respetando la autonomía judicial, pero mantendrá su posición sobre la importancia de fortalecer la certidumbre jurídica en el país.
