México, 22 enero.- El célebre escritor mexicano, José Agustín Ramírez Gómez, conocido por su influyente contribución a la literatura contemporánea, falleció tras enfrentar varias semanas en un estado de salud delicado, según anunció su hijo, el reconocido ilustrador José Agustín Ramírez.
La noticia de su deceso se difundió a través de una publicación oficial, en la que se afirmó que el autor partió en paz, rodeado de su amorosa familia. La pérdida de José Agustín Ramírez Gómez representa un momento triste para la comunidad literaria y cultural de México, que reconoce en él a un ícono literario de la segunda mitad del siglo XX y más allá.
La delicada situación de salud del escritor fue revelada a finales de diciembre del año pasado, generando preocupación entre sus seguidores y admiradores. A medida que su pronóstico se volvía reservado, José Agustín recibió la extremaunción días después por parte de su amigo, el sacerdote José Luis.
El hijo del escritor compartió las últimas palabras de su padre, quien manifestó: «Con esto ya mi trabajo aquí se va terminando». Estas palabras encapsulan la resignación y la aceptación de un legado literario que trasciende generaciones.
La obra de José Agustín Ramírez Gómez, desde su primera novela «La Tumba» hasta sus ensayos y contribuciones al periodismo cultural, deja una huella imborrable en la historia literaria de México. Su partida deja a la comunidad literaria y a sus seguidores con un profundo pesar, pero su legado perdurará a través de sus escritos que continúan inspirando a las generaciones venideras.
Con profunda tristeza lamentamos el sensible deceso del escritor, guionista de cine, traductor, dramaturgo y crítico de rock, José Agustín Ramírez Gómez, galardonado con el Premio Juan Rulfo para Primera Novela, cuyas obras son de lectura imprescindible para las jóvenes… pic.twitter.com/WHBUZ75sJL
— Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (@bellasartesinba) January 16, 2024
¿Quién fue José Agustín Ramírez Gómez?
José Agustín Ramírez Gómez se erigió como un pilar fundamental, cuya influencia ha perdurado a lo largo de las décadas. Nacido el 19 de agosto de 1944 en Acapulco, Guerrero, el autor fue reconocido por su destacada labor en diversos campos creativos y su incansable contribución a la cultura.
José Agustín, distinguido con el Premio Nacional de Lingüística y Literatura por la Secretaría de Educación Pública en 2015, fue un multifacético creador que ha dejado una huella imborrable en la literatura, el cine y la promoción cultural. Su versatilidad se manifiesta en roles que abarcan desde periodista y ensayista hasta traductor, dramaturgo, director y guionista de cine.
Su formación académica, marcada por estudios de letras clásicas en la UNAM, dirección cinematográfica en el CUEC/UNAM, y composición dramática en el INBA y la ANDA, estableció las bases para una carrera prolífica y diversa. Inmerso en el taller literario de Juan José Arreola entre 1962 y 1965, a los 19 años, dio a luz su primera novela, «La Tumba», preludio de una obra que transformaría el panorama literario mexicano.
En 1966, con la publicación de «De perfil», José Agustín se convirtió en uno de los arquitectos de la llamada «literatura de la onda», corriente que insufló aire fresco a las letras mexicanas al incorporar elementos de la cultura pop y reflejar la realidad de los jóvenes de la época.
José Agustín un referente del periodismo cultural
La trayectoria del autor también se destaca por su incursión en el periodismo y la promoción cultural. Colaborador en las principales publicaciones del país y conductor de programas culturales en radio y televisión, José Agustín ha compartido su perspectiva única y ha sido un puente entre la literatura y el público.
A lo largo de su carrera, ha recibido prestigiosos reconocimientos, como el Premio Nacional de Literatura «Juan Ruiz de Alarcón» en 1993, el premio «Dos océanos» del Festival Internacional de Biarritz en 1995, y la medalla Bellas Artes en 2011, entre otros. Su ciudad natal, Acapulco, honra su legado con el Premio de Cuento «José Agustín» desde 1996.
José Agustín Ramírez Gómez, Premio Nacional de Lingüística y Literatura en 2015, continúa siendo un faro inspirador para generaciones venideras, demostrando que su contribución a la cultura mexicana trasciende el tiempo y sigue iluminando el camino de las letras contemporáneas.
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